27 Nov Rosa Mantero, ejemplo de cómo aprovechar el apoyo de Sevilla Emprendedora para dos épocas distintas del desarrollo de su clínica de podología

“Recomiendo acudir a Sevilla Emprendedora para mejorar el funcionamiento de tu empresa. Te ayudan a estructurarla mejor, a trabajar de modo más eficiente. Lo he hecho en dos momentos diferentes de mi trayectoria empresarial, para consolidar y para crecer”. Así lo comenta, con profunda convicción, Rosa Mantero, creadora hace 17 años del Centro Mantero, de podología clínica y deportiva.

Rosa Mantero confiesa que “con Sevilla Emprendedora he aprendido a ordenarme para incluir en la agenda tiempo para dedicarlo a la gestión y no solo a ‘producir’ labor podológica. La gestión no produce ingresos de inmediato, no lo monetizas a corto plazo, pero es lo que lo mantiene a largo plazo con balance positivo. Hay que tener esa visión, esa mente abierta”.
“En Sevilla Emprendedora me han ayudado a definir la línea de negocio, a establecer mejoras, a estructurar la gestión interna, a entender la estrategia como una evolución progresiva. Lo primero ha sido orientarme a saber analizar las cifras, y considerar qué es rentable y qué no lo es. Ahora en todo eso tengo mejor formación y gestiono de modo más ordenado. También me han ayudado a cuidar todos los detalles para que el servicio al cliente sea de calidad en todas sus vertientes. Si das una atención podológica buena, no puede haber un desconchón en la pared”.

Necesidad de evolución continua

“Los negocios no son estáticos. A quien se estanca, se lo lleva la corriente. Además, aunque uno no quiera, hay que realizar actualizaciones. Llega la inteligencia artificial. Llega la obligatoriedad de la facturación electrónica, etc. Me llama la atención que muchas personas no sean conscientes de que la actividad que ejercen vocacionalmente existe en tanto que es una empresa. Por eso también aconsejo acudir a Sevilla Emprendedora y aprovecharla. Porque en la vida hay momentos en los que se está tan ocupado en resolver lo inmediato, que conviene tener en cuenta a alguien que desde fuera te ayuda a ver más claro en qué aciertas y en qué te confundes”.
Rosa María González Mantero, que es su nombre completo, nació hace 39 años en La Puebla de los Infantes (Sevilla). “Desde joven yo tenía vocación sanitaria, de ayudar a las personas. Pero no me veía trabajando dentro de un hospital. Quería tener trato con los pacientes a través de una atención muy cercana y continuada. Me alegro de haber elegido podología. Aprender sobre el funcionamiento del cuerpo, sobre el aparato locomotor. Me pareció un ámbito muy interesante para enfocarme en ayudar a las personas”.
Su primer trabajo como podóloga fue en el Centro de Podología Mauri, en la calle Feria, en 2008, para hacer una sustitución. “Y en el año 2009 me ofrecieron traspasarme la clínica. Me atreví a aceptar el reto, aunque yo era muy joven, tenía 22 años”.
Recuerda Rosa Mantero que “la primera etapa fue de pura supervivencia. Mientras me esforzaba por conseguir usuarios para mi consulta, para conseguir más ingresos trabajé en otras clínicas, y también en residencias de ancianos”.

Primera etapa con Sevilla Emprendedora

En 2017 descubrió el programa Sevilla Emprendedora, del Ayuntamiento de Sevilla, concebido para ayudar a personas emprendedoras, y también a las que ya tienen en funcionamiento su empresa. «Acudí a Sevilla Emprendedora para que me orientaran a mejorar el desarrollo de mi actividad empresarial”.
El equipo de coordinación de Sevilla Emprendedora, tras conocer su caso y sus necesidades, le asignó un mentor para ayudarla a cumplir sus objetivos. “Mi mentor fue Fernando Dugo, economista y consultor con mucha experiencia, ya jubilado. Cuando le expliqué lo que yo estaba haciendo y cuál era mi trayectoria, y qué problemas yo tenía, empezamos a trabajar de modo concreto. Él hizo un análisis económico-financiero del negocio, ‘le sacó las tripas’, me ayudó muchísimo a la organización interna, a tener una línea a seguir, y no matar moscas a cañonazos”.
“Una de las tareas que me puso fue contactar con el mejor equipo profesional en podología que yo pudiera conocer, para aprender de ellos. Y contacté con Luis Gordillo, a quien descubrí en mi época de estudiante en la facultad. Sigue encabezando en Sevilla una clínica de podología, radicada en la Avenida de la Cruz Roja. Fue como mi hada madrina para organizar mejor mi actividad como podóloga. Estuve yendo una vez cada 15 días durante seis meses a su clínica. A observarlos trabajar, a resolver dudas, a ver casos clínicos, a mejorar en la relación con los pacientes. Hoy en día sigue siendo una referencia para mí”.
“En Centro Mantero nuestro lema de trabajo es estar al servicio del cliente. Si a una persona no le hace falta un tratamiento, no se lo ofrecemos por afán de ganar dinero. Tenemos muy presente un criterio primordial: El cuerpo humano es un todo, y si una parte sufre, todo el cuerpo está sufriendo. Hay que entender el cuerpo con un enfoque integral. Por ejemplo, a una persona con depresión le puede salir un papiloma, porque somatiza sus quebrantos y también afloran por ahí”.

El paso por Sevilla Emprendedora fue para Rosa Mantero un impulso. Mejoró su capacidad de gestión y así pudo crecer. Realizó el Máster en Clínica Deportiva para tener una especialización. En mayo de 2023 abrió su nueva sede, la que tiene actualmente en la calle Escoberos, en el barrio de la Macarena. En sus 80 metros cuadrados dispone de un espacio para gabinete clínico, y una parte para biomecánica deportiva.

Aprender a gestionar con eficiencia

Dos años después, para seguir avanzando adecuadamente en la modernización de su empresa, Rosa Mantero decidió volver a contactar con Sevilla Emprendedora y confiar en su equipo de formación y consultoría. “Me han asignado como mentor a Félix Martín. Estoy muy contenta con su labor. Es un profesional muy eficiente, analiza muy bien la gestión de la clínica, me orienta para resolver las cuestiones concretas en las que yo estaba atascada”.
Además, Félix Martín la ha guiado a trabajar con integrantes del equipo de consultoría de Sevilla Emprendedora para mejorar diversas vertientes que necesita fortalecer, con el apoyo de cada cual según su especialidad. “Con Carlos Ojeda estoy empezando a implementar la inteligencia artificial en la atención a potenciales clientes para gestionar la cita previa. Con Sara Aguilar estoyincorporando técnicas de marketing digital. Los años de trayectoria que llevo me han hecho entender la importancia del marketing”.
Añade que “con Macarena Gutiérrez voy a actualizar todo lo relacionado con protección de datos, y con Reyes Pueyo las técnicas de coaching para el autoconocimiento. Porque una empresa no es algo impersonal, y es fundamental ser consciente de limitaciones o bloqueos que pueden influir en la atención a los pacientes o en la gestión de la carga de trabajo, para afrontarlos y solucionarlos”.

El Centro Mantero ya cuenta con dos podólogos, con ella trabaja Alejandro Roas Bernal. Combina la asistencia podológica a cualquier tipo de personas con la creciente orientación hacia pacientes de perfil deportivo que tienen lesiones, ya sean profesionales o aficionados. “El estudio de pisada también se hace a personas que no son deportistas, es distinto en su configuración”.
Quiere ampliar esa línea de actividad, dirigiéndose a federaciones y clubes deportivos. Se siente orgullosa de haber trabajado sobre el terreno en competiciones relevantes, y atendiendo a deportistas de prestigio como el ultrafondista marroquí Zaid Ait Malek, ganador de muchas carreras dentro y fuera de España.

Mejorar la comunicación en público

También está afanada con el equipo de consultoría de Sevilla Emprendedora en que le ayuden a mejorar su comunicación hablando en público para difundir mejor sus mensajes y ser más convincente para que la elijan, ya sea una persona o un colectivo. Implantar el sistema de citas online marcó un antes y un después en la gestión de la clínica. “Ahorra mucho tiempo y mucha atención telefónica. Por ejemplo, el joven al que he atendido antes de esta entrevista, no nos conocía, nos ha descubierto por internet, ha visto la calidad de lo que hacemos, y directamente ha pedido cita a través de esa herramienta digital, y ha llegado a la clínica sin haber hecho una sola llamada”.
Por su experiencia, considera que “es importante educar a los pacientes para que te llamen dentro de una franja horaria si tienes un problema, para que te escriban por correo electrónico si no es urgente, para que cojan directamente la cita, y eso lo pueden hacer en cualquier momento”.

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